Me dieron ganas de ser astronomo por un ratito... sabrosa tu escritura.
Los libros de texto resumen el movimiento de los astros en tres leyes de Kepler (de las cuales se dedujeron las leyes de Newton posteriormente y con las cuales se encontraron las excepciones de esas leyes con Einstein):
* Primera ley (1609): todos los planetas se desplazan alrededor del Sol siguiendo órbitas elípticas. El Sol está en uno de los focos de la elipse.
* Segunda ley (1609): el radio vector que une un planeta y el Sol barre áreas iguales en tiempos iguales.
ley de las áreas es equivalente a la constancia del momento angular, es decir, cuando el planeta está más alejado del Sol (afelio) su velocidad es menor que cuando está más cercano al Sol (perihelio). En el afelio y en el perihelio, el momento angular L es el producto de la masa del planeta, su velocidad y su distancia al centro del Sol.
* Tercera ley (1618): para cualquier planeta, el cuadrado de su período orbital es directamente proporcional al cubo de la longitud del semieje mayor a de su órbita elíptica.
(Wikipedia)
Los astronomos insisten en mencionar estas leyes en sus clases introductorias y lo hacen por razones extra curriculares: se sorprenden de la elegancia y simplicidad con que encapsulan todo movimiento en la totalidad del universo. Lo que hay que entender aqui es que lo que llevo a ese descubrimiento fue precisamente esa ansia de elegancia. “Verdad”, “Ley comprobable” surge entonces de un anhelo casi estético. El concepto, las leyes que quedan solo vuelven a interesar, al menos para el científico honesto, cuando se refutan. Las leyes solo corresponden verdaderamente a la “realidad” cuando asombran.
Heidegger entiende que a todo “conocimiento proposicional”, “conceptual” corresponde un estado de animo. Hay un secreto que todo buen poeta guarda como tesoro: la forma en que nos acercamos a un objeto determina lo que ese objeto estará dispuesto a revelar. Rilke insiste de que la única forma de entender a un ente es tratarlo con una ternura absoluta, dedicarle el corazon entero, como si fuese lo único que existe. Los objetos vibran, estallan desde su silencio a una intensidad directamente proporcional a nuestra disposición a abrirnos hacia ellos, a dejarlos ser.
Tenes razón en hablar de humildad. Hay que ser fuertes para mantenernos en la pregunta y resister la tentación de cerrarnos al concepto. LO UNICO QUE PERMITE VIVIR VERDADERAMENTE ES EL MISTERIO, pero para ello hay que vivir con huevos, hay que vivir con la humildad que requiere el asombro perpetuo: el niño que juega con toda la seriedad del mundo. Solo asi el diagrama que ejemplifica las tres leyes de Kepler se convierte en pieza de arte:

(En mi tiempo de estudiante de ingenieria, en una borrachera, por poco me tatuo este diagrama, ja)
Por cierto, si quieren conocer a un cientifico con estas convicciones, lean la autobiografia de Feinman. Ese hombre es lo mejor.
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